UN PUZLE VIVO
Gerardo VillarMe choca mucho que a la hora de trabajar el Sínodo de los obispos, hemos puesto el acento en que las mujeres puedan ser sacerdotisas. Lo doy por contado.
Pero me gustaría proponer y trabajar por otras realidades muy sencillas pero que nos pueden ayudar a ser todos y todas protagonistas de la comunidad parroquial. Lo importante es que todas las parroquias del arciprestazgo funcionen como una sola comunidad. Apunto unas pistas: que el cura no esté de párroco más de seis años
Que los curas -si hay varios- sean párrocos, alternativamente.
Que haya asambleas parroquiales trimestrales con la participación de todos los fieles.
Que se conozcan las cuentas mensualmente y se debata su uso… si ha de ser así o si hay que usarlo en otros fines. Y que se intercambien bienes entre las parroquias.
Que se estudie si el dinero hay que invertirlo en obras o en personas.
Que se renueven los miembros del Consejo Pastoral y no sean solamente los amigos del cura o los que piensan como él.
Que haya un trabajo arciprestal a todos los niveles y en todos los sectores: organización de catequesis, grupos, charlas sobre temas sociales, económicos y políticos.
Que se compaginen los horarios de misas de forma que no haya dos eucaristías a la misma hora.
Que publique una Hoja para todas las comunidades.
Que los pobres y marginados lo sean de todas las parroquias, aunque haya que hacer una atención individual.
Que cada sacerdote tenga un día libre a la semana.
Que las homilías las prepare el grupo de liturgia Inter-parroquial.
Que se anime a los seglares que estén preparados en algún tema, aunque no sean creyentes, a prestar servicios de información y formación en diversos aspectos.
Que se dé especial y primaria importancia a las personas que están al margen de la fe y de la vida.
Podríamos añadir… Pero lo importante es que todos los cristianos de las diversas comunidades estemos relacionados y seamos una Comunidad de seguidores de Jesús hoy y aquí. Piezas sueltas pero como un puzle, integrados por el Espíritu en una misma Comunidad.
Gerardo Villar